De solo pensar que aquellas plataformas digitales globales, con la que empezamos a vincularnos comercialmente hace unos 30 años y que hoy recién hacemos uso común en nuestra vida, pueden quedar en muy poco tiempo obsoletas, ya nos plantea una inquietud.
De que toda la evolución de la tecnología desarrollada hasta el presente, puede quedar en muy poco tiempo en el pasado, ya nos llena de dudas.
Y entonces, solo debemos imaginarnos el dilema que nos plantean las infinitas posibilidades que hoy nos abre la IA sobre los seres humanos, sobre nuestras interrelaciones y sobre nuestra identidad digital personal (ID).
Y el dilema se nos plantea como seres humanos, más allá de toda creencia religiosa o política, para plantear algunos límites y/o en su caso ninguno.
Y esos límites que logremos fijar, seguramente, marcarán la diferencia de la humanidad futura.
La IA nos entrega a diario poderosas herramientas que sin duda aumentaran la inteligencia humana.
Desde el lanzamiento de Chat GPT/ 2022, la masificación de esta y otras apps similares, nos debería poner en alerta y con las urgencias que el tema nos plantea, los riesgos y beneficios.
Por ello es importante que como comunidad participemos en su discusión, propongamos límites o no, encrucijada humana o solo científica, desafíos presentes y futuros. Allí nace el dilema de la IA.
Un punto de partida importante para participar de las discusiones es adentrarnos en la lectura de la Primera Edición del Diálogo Global de La Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas (UNAOC) que sintetizó en un manifiesto, la promoción de una ciudadanía global orientada hacia un mundo de Humanidad.
De allí la importancia de seguir profundizando en los límites que nos plantea la inclusión de la IA, en nuestras vidas, en nuestra humanidad y que sea a su servicio.
Que su evolución y desarrollo a un ritmo avasallador respete el progreso, nuestros derechos y nuestra dignidad humana.
La significativa importancia de la IA, para un mundo mejor también se juega en las alianzas entre el sector público y el privado, entre las empresas, Instituciones, Organizaciones, Universidades y en lo que respeta a cada uno de nosotros y a nuestros empleos y profesiones.
Sin duda alguna, tampoco todavía podemos dimensionar en toda su magnitud los impactos positivos buscados y que podemos beneficiarnos de la IA.
Sobre este punto voy a citar a Carlos Creus Moreira (coautor de: «The TransHuman Code»), quien es una bandera desde hace años, en la lucha para que la IA no avance sobre nuestra personalidad y que nos enseña a defender y proteger nuestra identidad digital personal, de los mal usos y abusos, pero destaca cosas positivas y que acertadamente señala…”tan solo tenemos que Imaginar una IA por ejemplo familiarizada con nuestro historial médico encriptado a través de nuestra identidad digital personal, pero capaz de predecir potenciales problemas de salud mientras se mantiene total privacidad. Así por ejemplo la IA podría proporcionarnos información personalizada, accesible sólo a esa identidad digital específica, asegurando un intercambio seguro de datos sensibles”. (Londres 2023)
Y si tenemos que citar unas profecias sobre la IA y la posibilidad de que la IA se salga de control, que mejor que señalar lo que dijo Bill Gates:…» quizás podría una máquina decidir que los humanos son una amenaza, y concluir que sus intereses son diferentes a los nuestros o simplemente dejar de preocuparse por nosotros? o cuando señalo:…»la IA puede generar una especie de Guerra Fría en la que las potencias diseñen armas tecnológicas poderosas que puedan acabar con el mundo, sin necesidad de ser armas físicas, sino que se trata de desarrollos que puedan moverse por la red».
La próxima 2da. Edición del Diálogo Global, del cual participaremos, tendrá lugar el 20 de octubre en el Palacio de las Naciones, Ginebra. Suiza, nos plantea el desafío: “Hacia el mundo de una humanidad», es crucial para el momento histórico que compartimos los humanos, dado que tratará de ir resolviendo el dilema de la IA.
Y desde allí en adelante será: el todo por el progreso científico tecnológico y/o cuál parte o el todo de los derechos humanos fundamentales deberán ser respetados por la IA.